Wednesday, September 20, 2006

Morir. (Del lat. vulg. Morire, lat. mori).


La sien hinchada, la sangre agolpándose en la cabeza, regurgitando junto a los pensamientos que van y vienen más rápido de lo que una neurona recapacita, electricidad sumándose, y la sensación de pesadez, la cabeza que es un globo y la nuca resistiendo las lágrimas que caen desde los ojos y arrastran el sudor consigo. La cabeza enorme, inmensa, congestionada de ideas sin parir, de palabras inconclusas e innecesarias, presión, una olla express al borde y la puta válvula perdida, y de pronto un zumbido y la luz que entra por los ojos se oscurece, todo la visión periférica se desvanece y la cabeza a punto de reventar no aguanta ya la luz cada vez mas intensa en el centro del ojo y el zumbido y la cabeza que explota y la luz cegadora y el zumbido que ya no deja oír nada y después el silencio…

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