Wednesday, January 10, 2007

...Por el principio...

Bendito San Antonio de Padua,
santo de las causas perdidas,
no hagas mi tarea más ardua
ayúdame sanando mis heridas.

Querido San Expedito, santo y bendito,
Que la luz de tu palabra nos alumbre
Apiádate de esta alma que sucumbe,
que lo que tenga que ser, sea rapidito.

En fin.
Tengo que descongestionar mi cerebro. Hace un rato ya que el desamor y la tristeza me absorben y me han dejado una sola neurona para ajustar mis signos vitales, procesar todo lo procesable y cubrir mis necesidades motrices. El resto de mí está enfrascado en una batalla que perdí hace mucho tiempo ya… Así que haciendo historia, recuerdo que mi bisabuela le rezaba a san Antonio de Padua cuando se le perdían las cosas y casi siempre las encontraba, así que aunque no me se el rezo y nunca he sido creyente, pues que me supongo que rezarle a algún santo para cuando se nos pierde el camino, podría funcionar, y digo nunca se pierde nada con probar…

Lo realmente importante, es que tengo que hacer que esa sola neurona que queda en mi cabeza se enfoque y reconstruya, ¿qué?, quien sabe… pero se que yo me extraño y que no me reconozco…

Así que ojalá esa sola neurona a la que a partir de hoy llamaremos Marta (ella se llamaba Marta, ella se llamaba así), a partir de hoy, Marta y yo nos dedicaremos a procesar lo que haya que hacer, haremos sinapsis y silepsis… reconstruiremos, tomaremos cerveza y ya veremos por donde empezar a colocarnos de nuevo el letrero que trae mi nombre escrito con neón azul… ¿por donde empezar?...

No comments:

Post a Comment